La vida sin duda no es fácil, y siempre podemos encontrar una excusa para cesar en el entrenamiento, y apartarnos del Hapkido, no es el caso del alumno Alberto Jiménez, que a pesar de tener que irse a vivir a Alemania por cuestiones laborales, no sólo no ha permitido que la distancia le aparte del entrenamiento ni de nuestra escuela , sino que es más, lo ha convertido en acicate para incrementar su progresión y trabajo a la espera del ansiado reencuentro, ese es el camino, a cada obstáculo, más impulso para superarlo.