Dedicado a aquellos que con su sudor y su ilusión hicieron de un
sueño casi imposible una realidad, de una humilde escuela una cuna de
desarrollo marcial, a todos aquellos que estuvieron con nosotros y que
aunque ahora no estén por circunstancias de la vida siguen formando
parte de nuestra familia marcial, a todos aquellos que compartimos el
amor por este maravilloso arte marcial, a los que son pilares de nuestro
crecimiento, a aquellos que nos siguen en la distancia y no nos olvidan
, a aquellos que hicieron y hacen grande nuestra escuela, este video va
por ellos, gracias,.
LA MONTAÑA MÁS GRANDE EMPIEZA CON UN POCO DE ARENA